El Ayuntamiento de Navalcán iluminará su fachada con los colores de la bandera Española en honor al triunfo del equipo femenino de waterpolo
España salió decidida a por la final ante las ‘diosas acuáticas’ helenas. A los 27 segundos, martillo demoledor de Elena Ruiz para poner el 1-0. Y Nona hacía el segundo tanto suelta de marca. Parecía que las griegas habían salido un tanto ‘blandas’ y aquí no hay que regalar nada, que es una final. Por si fuera poco, Martina Terré le paraba un penalty a Eleftheria Plevitrou, y Anni Espar, por arriba, ponía el 3-0. Demasiadas facilidades. Y en estas se agotó el cuarto.
Grecia tenía que reaccionar y lo hizo, pero su primer gol llegó casi a los 10 minutos, Chyridioti en superioridad. Había que seguir duro en defensa y aprovechar en ataque las superioridades, o los reveses mortales de una Paula Leitón que, cuando agarra el balón, las opciones de que vaya dentro son enormes (4-1). Pero si algo tienen las helenas es que luchan hasta la extenuación. De hecho, en un visto y no visto, se colocaron a un gol para cerrar un segundo cuarto extraño, con muchas imprecisiones en el ataque español (4-3).
Definitivamente la tensión y los nervios se apoderaron de los dos equipos. Cuatro minutos sin marcar, con otro penalti fallado por las griegas, mejor dicho, parado por Martina. Y España, más de lo mismo, penalti al palo largo marrado para ponerse dos arriba. Un sinvivir. A la segunda marcaba Elena Ruiz para poner el 5-3, pero el partido era realmente espeso.
Ocho minutos en busca de la gloria. Ese era el tiempo que le quedaba a España para mantener esa renta y colgarse el oro. Elena se había cargado con dos faltas. Todo por decidir. Xenaki les puso en nuestro cogote (5-4), pero Maica García volvía a hacer la goma. Tensión máxima, sobre todo cuando Chyridioti empataba a menos de cuatro minutos.
Menos mal que apareció el brazo de Bea Ortiz, por el centro, para no perdonar. Bea la tuvo para cerrar, pero la que cerró fue Maica con una 'cuchara' de oro (8-6). Minuto y medio, otro de Anni con VAR incluido. España, campeona. España fue fiel al dicho: "Las finales no se juegan, se ganan".